Isla Tamango es un recorrido en el que cada cocktail de autor viene a representar diversos destinos o momentos del día. Ese es el motor de la nueva carta de Tamango, bar basado en la cerveza que le da su nombre, pero que desde que abrió, hace algo más de un año y medio en Vitacura, le ha dado un sitial importante a la coctelería, la que se luce por ingenio y calidad.
Quien está a cargo de esta misión es el bartender argentino ganador del World Class Argentina 2023, Pablo Zitarrosa, quien viaja constantemente para asesorar esta barra comandada por Maximiliano Abarca.

La aventura consta de cinco cocktails y el encargado de comenzar es Brunch 75, una creación que te sorprende por su aroma, pues viene como un perfume de brioche. Por su nombre, obvio que las burbujas no podían quedar fuera, las que se combinan con vodka de jengibre, frutilla, fenogreco, una planta originaria de Asia y del sureste de Europa. Ideal para comenzar, de espíritu frutal y un picor juguetón.
Okinawa Vibes busca evocar un paseo por el bosque de Sakuras, flores del cerezo en japonés. De inmediato queda en evidencia su inspiración asiática, su impronta floral y su esencia delicada y elegante, lo que se logra por la mezcla de gin de Gochugaru [ají en polvo], lima-limón, sandía, shiso [hierba de la familia de la menta], sidra de pera, bitter de sésamo y clara de huevo para lograr una atractiva espuma que podría emular la copa de los árboles que le da el nombre.

Para hacerle un guiño a la playa está Oil Me Up, nombre que quiere evocar ese bronceador con aroma a coco. Pero ojo, que es solo un truco, pues este cocktail no lleva nada de esa fruta, aunque no lo creas. Esa idea nace de la unión de Singleton 12 años, Humboldt, manzana verde, pistacho, Palo Santo y Pop-Corn de amaranto.
Sour Volcán apela a un riesgo de erupción, por eso, se ocupa de base el pisco y el mezcal, el que traspasa su personalidad ahumada, mientras que el agave combina con la uva del destilado nacional. Se potencia con una dosis de cúrcuma, canela, lima, horchata de almendras, jengibre negro spicy y perfume de Lapsang Souchong.
Para terminar, y pensando en la noche, está La Martinique, goloso y potente, pues lleva gin con fat wash de coco, ciruela, frutilla, huacatay y Kirsch, un destilado de cereza, por lo que es genial para acompañar un postre o a modo de bajativo.

Si bien, las novedades estaban centradas en los cocktails, las cervezas siempre están en constante renovación, una misión a cargo del sommelier corporativo, Felipe Pizarro. Dentro de lo nuevos está Cupido Basta Ya, una NZ Pils muy aromática, de cuerpo ligero, cítrica y frutal.
En tanto, la cocina, comandada por la chef Isidora de la Cuadra, sigue mostrando técnica, ingenio, cuidado y sabores bien logrados. Muestra de ello es la irresistible Merluza Austral con Orzo y Curry Amarillo, cocinado con leche de coco, lima kaffir, cilantro, menta y albahaca; o Berenjena Santa Sofía, una receta vegana y de aires mediterráneos donde la berenjena aparece ahumada y glaseada en miso, acompañada de una ensalada de lentejas beluga y hierbas, bañada en salsa cremosa de tahine.

Este recorrido de sabores no solo demuestra la preocupación de que la barra de coctelería esté en lo alto, algo no usual en bares donde la cerveza es el producto estrella, y vaya de la mano con su consistente cocina. De seguro, el manejo de esta trilogía es lo que permite percibir a Tamango como un lugar consistente, de calidad, que tenga onda y que suela estar a tope, siendo ahora su isla una parada interesante de descubrir.
☆ ¿DÓNDE?: Juan Bautista Pastene 3101, Vitacura. Para ver dónde está pincha AQUÍ. ☆ LO
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