☆ SU HISTORIA: Un poco menos de mes y medio. 40 días. Eso fue lo que se tardó en abrir Bangkok, restaurante de comida tailandesa que es parte del grupo Peñafiel, los mismos de Fuente Mardoqueo y del extinto Mardoqueo Costillas. De hecho, ocuparon el espacio de lo que fue esta casa para incursionar con esta nueva marca. Todo nació porque la familia es fanática de esta cocina y extrañaban un lugar que se apegara a los sabores tradicionales, por eso decidieron bautizarlo como la capital de Tailandia, y que cumpliera, según afirman, con las 3B. Fue por esa razón que Gustavo Peñafiel decidió incursionar en esta gastronomía, abriendo las puertas el 12 de diciembre de 2022.
☆ ESENCIA: Sabores tradicionales de Tailandia, con generosas porciones y un dejo casero, como es el sello de Mardoqueo.
☆ RECOMENDADOS – EN LA MESA: Por el momento, la carta es acotada y cuenta con recetas tradicionales de Tailandia. Sin embargo, se está trabajando para agregar más platos. En lo que respecta al picor, hay una escala con doce niveles para elegir. A la mesa llega una sabrosa cortesía con unas masas fritas y una trilogía de salsas, todas bien logradas y que se complementan entre sí.
Popio Pak Tod. Con una fritura crocante y sabrosa aparecen estos rollitos rellenos de vegetales, que son cocinados como una especie de guiso. Para realzar los sabores viene con una salsa sweet chili que aporta dulzor.
Satay. Acá se puede escoger si es de carne roja, camarón, tofu o el clásico pollo. En ese caso, aparece una carne blanca sabrosa, aunque no completamente jugosa, que ha sido cocinada a la plancha y aderezada con salsa de curry y maní molido. Buenos sabores.
Pad Thai. Sabores tradicionales y envolventes, con una humectación algo más generosa de lo usual. Así se podría definir esta clásica receta hecha con fideos de arroz salteados con huevo, en este caso de buena factura, cebolla, cebollín, diente de dragón, salsa de tamarindo y maní triturado, que le aporta sazón y crunch. La proteína también es a elección: tofu, carne roja, pollo, camarón o mixto.
Khao Pad. Adictivo y goloso arroz frito estilo taliandés que va con huevo, tomate, ajo, cebollín, cilantro, brócoli, zanahoria y zapallo italiano, las que llegan en su punto, al dente, haciendo que tenga ese entretenido crunch. La proteína puede ser tofu, carne roja, pollo, camarón o mixto, ya que es a elección. En el caso del tofu se presenta notable: con un buen marinado, que le da más sabor, y una rica consistencia.
☆ VEGETARIANO – VEGGIE: La totalidad de los currys son veganos antes de que se les incorpore la proteína. Hay alternativas vegetarianas en las entradas y principales, ya que cuentan con tofu.
Curry rojo. Si bien, la proteína puede ser carne roja, pollo o camarón, también hay tofu. La que se elija es cocinada en una base de curry rojo, leche de coco, kaffir, bambú, pimentón rojo y hojas de albahaca y va con el tradicional arroz jazmín. El resultado son sabores profundos, de una reminiscencia casera, con un buen nivel de picor, medio coquetón.
☆ DULCE: Por el momento la carta cuenta con dos opciones de postre, ambas de un perfil distinto y que cumplen muy bien.
Helado frito. Todo un hit estas bolitas empanizadas con un buen batido, que soporta y da crocancia, rellenas de helado de vainilla. Van sobre una cama de brownie y son acompañadas con fruta de la estación y salsa de frutos rojos. Un juego de temperaturas y texturas.
Sakoo. Tropical y suave, con espíritu frutal, es este postre que consiste en perlas de tapioca cocinadas en leche de coco y azúcar de palma. También va con frutas de la estación y salsa de mango.
☆ CHEF: Está a cargo el chef Edson Betancourt, quien tiene experiencia en el rubro, dado que trabajó en Kanda Thai y anteriormente en Anakena, restaurante del hotel Hyatt Santiago que hace varios años cerró sus puertas. Dentro de su equipo hay tres cocineras tailandesas, incluso, una de ellas no habla español, y todas estuvieron en los fogones del conocido Lai Thai.
☆ RECOMENDADOS – EN LA BARRA: Su carta está en desarrollo y contará con opciones de vinos ad hoc. Por el momento, hay bebidas, jugo de la casa, cervezas, vino y espumante.
☆ EL LUGAR: Desde su entrada cautiva por su toque verde y floral, aunque no sean plantas reales. En el salón se impone una muralla que del suelo al techo contiene diferentes elementos propios de la cultura tailandesa. También lo hace su cocina a la vista, detalle que la transforma en una especie de kitchen show. El segundo piso se sale del formato restaurante tradicional, gracias a sus mesas bajas, de 40 centímetros, y cojines en el suelo, lo que invita a vivir otro tipo de experiencia en este acogedor espacio ideal para citas o eventos especiales, como cumpleaños, ya que se reserva para esos fines.